En las redes del petirrojo - Paula Barbero



En los últimos años, las editoriales españolas han invadido el mercado con multitud de novelas negras llegadas de los países más fríos, en medio del 'boom' nórdico de este género, que llega como recién descubierto, con autores que podrán pasar sin pena ni gloria, y otros por los que podemos estar eternamente agradecidos (¿quién sabe si nos los hubieran acercado sin la explosión nórdica?).

Uno de esos es Jo Nesbo (Oslo, 1960), cuya obra aterrizó en España por medio de Petirrojo, en medio de ese auge de lo nórdico, y entre incomprensibles comparaciones con Stieg Larsson y su trilogía. Aunque Petirrojo es la tercera obra de su serie protagonizada por Harry Hole, es la primera editada en nuestro país, y un inmejorable punto de partida para conocer a este detective, al que difícilmente se puede abandonar después de toparse con él.

Harry Hole es detective de policía, nacido en Oppsal (Oslo), que el autor describe como un hombre de casi dos metros de altura, atlético, rubio, de nariz grande, y con una boca que atrae a las mujeres. En su carrera cuenta con estar graduado en la Escuela de policía y la Facultad de derecho, además de estar especializado en asesinos en serie tras su estancia en Chicago.

Nada especial en un detective de policía.

Si añadimos que es un brillante investigador, a pesar de no seguir siempre los cauces adecuados, ni entender de jerarquías, y que su vida personal es un caos (alcohol de por medio), ni siquiera podemos concluir que sea un protagonista original.

“Está en contacto con lo más oscuro de sí mismo y eso le acerca a los que persigue. Es un héroe que puede desintegrarse, frágil, esos son los mejores. Lo que buscas en una novela negra no es lo aparente, el paso del caos al orden, la resolución de un conflicto, de un misterio, sino contemplar lo que le ocurre al protagonista. Lo que interesa al final es si va a condenarse o a salvarse”.
Con esta presentación tan poco alentadora, cobra mérito que Harry Hole se meta en la lista de los buenos de muchos lectores (y no solo por su boca), a pesar del lado oscuro y complicado del personaje, a pesar de parecer uno más, y a pesar de la saturación. Tampoco ayuda que su creador sea el noruego Jo Nesbo, ya que en medio de la oleada nórdica, esto podría sembrar la duda que genera la sombra de Stieg Larsson (con el que es difícil encontrar la similitud, a pesar de las reseñas que se empeñan en citar al sueco al hablar de las obras de Nesbo).
Pero Harry Hole no necesita ningún ‘boom’ nórdico, sus historias son una explosión por sí solas.

Jo Nesbo le dio nacimiento en 1997, con Flaggermusmannen (en la que el autor manda a su personaje a Sidney a colaborar en la investigación del asesinato de una joven noruega), y ya lleva ocho títulos, tres de ellos traducidos al español, de los que Petirrojo (Rødstrupe, 2000) supone el gran punto de partida para que esta serie se diera a conocer.

A falta de saber qué esconden los dos primeros títulos, sin editar en España, no se puede negar que Petirrojo sea una inmejorable presentación en sociedad de Hole en nuestro país.

Cada entrega de Harry Hole nos presenta al mismo protagonista, con su evolución vital, poniendo al lector al borde de un ataque de nervios. Pero sobre todo, cada nueva historia, cada nuevo caso, presenta los mejores ingredientes y ofrece una receta llena de nuevos recursos, acción hasta el final, giros peligrosos para cualquier corazón que enganchan al lector y lo mantienen en tensión hasta la última página. En fin, se puede decir que lo tiene todo, algo que Jo Nesbo trata de transmitir.

“Todas las buenas historias han de tener un fondo filosófico, tiene que haber opciones morales en el corazón de la historia”.
Para descubrirlo, basta empezar la serie por Petirrojo (saltárselo sería imperdonable). Tras los dos primeros títulos de Harry Hole, Jo Nesbo dio un giro a su obra, igual que en sus tramas, al iniciar un proyecto “mucho mayor” que lo que había escrito antes.

“Escribí los dos primeros libros como si tocara un solo de guitarra. Petirrojo fue como dirigir una orquesta”.
Petirrojo no solo es una orquesta bien dirigida. El fondo de la obra tiene una implicación y un punto de arranque personales para el autor. Jo Nesbo descubrió a los quince años que su padre participó en la II Guerra Mundial, tal y como éste le contó, luchando con las SS en el frente del este. Años después, Nesbo decidió volver a este periodo y tocar el tema en una gran novela, a la que sería injusto calificar como una simple novela de suspense o entretenimiento. La obra transmite una mancha histórica de Noruega, algo que, según insiste el autor, “sigue siendo delicado” y genera mucha vergüenza.

Aunque puede quedar tapado por la investigación de Harry Hole, lo que hay detrás de ésta llevó mucho tiempo a Jo Nesbo (dos años de documentación, de recopilación de datos técnicos e históricos, de entrevistas y testimonios), para completar la experiencia que en su día le narró su padre y presentar lo que -si no me ve nadie- me atrevería a calificar como obra maestra.

En Petirrojo, la investigación de Harry Hole se cruza con la historia de un grupo de veteranos de guerra noruegos que lucharon en el lado de los nazis, y cuyas vivencias seguimos cuando Nesbo nos transporta a los años cuarenta. Es aquí cuando muere Daniel, en las trincheras de Leningrado, y cuando en un hospital de Viena un soldado herido, que mantiene una relación con la enfermera Helena, dice ser Daniel.

Pero también estamos en 1999, y nos encontramos a Harry Hole, a quien, tras disparar por error a un agente de los servicios secretos, se le asigna la misión de comprobar información sobre una red de tráfico de armas relacionada con círculos de viejos y nuevos nazis.

Parece un lío, y lo es. Pero así, con esta mezcla temporal, con la manera de dosificar las piezas del puzzle, con los giros vertiginosos, Jo Nesbo va haciendo que todo encaje en nuestra cabeza y consigue una historia genial que en nuestro país sirve para que nos presente a Harry Hole, en una trama que primero nos hace perdernos, y luego nos sumerge en sus páginas hasta no querer salir.

Para vivir todo esto, el único secreto es adentrase en esta historia, dejarse llevar por esa confusión inicial y caer en las garras de las historias -siempre conectadas y enlazadas a la perfección- que nos presenta Jo Nesbo en su obra “más personal”.

A partir de ahí, la cosa solo puede ir a más, y con cada nuevo Harry Hole nos encontraremos con la tensión, el rencor, el mal, la venganza, el odio y el Oslo más oscuro, en una serie de novelas que no se ciñen a ser casos policiales, que conseguirán atraparnos, siempre con la ayuda de Harry Hole, un personaje arrollador (a pesar de todo lo que tiene de antihéroe, o precisamente por eso), al que hay que conocer, y cuyos ingredientes están formados por la propia personalidad de Jo Nesbo, amigos y conocidos, personajes de ficción, e incluso el policía local del pueblo de su abuela, o un borracho al que el autor llevó a casa trabajando de taxista. Todo esto para dar a luz a un personaje del que Jo Nesbo puede estar orgulloso, a pesar de que lo coloca “en la parte doliente del mundo.
“Harry Hole sabe que la felicidad le mataría como policía”.

Creo que nos tocará seguir sufriendo.


5 comentarios:

  1. Muy buena reseña, Paula, haces que este libro destaque por encima de los muchos que -como bien señalas- nos encontramos en las librerías. Hace siglos que no leo nada de este género, tomo nota. :)
    ¡Saludos!

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  2. Me encanta esta reseña que transmite exactamente lo que pienso sobre Jo Nesbø y su personaje Harry Hole.
    Harry se ha convertido en parte de mi familia, es un primo lejano sobre el que tengo noticias de cuando en cuando. Y no todas buenas, por cierto, porque no es perfecto. De hecho es un mar de imperfecciones, pero lo queremos porque es de la familia y porque sobre todas las cosas es honesto.
    A mi me molesta mucho que se le compare con Stieg Larsson, con todos mis respetos hacia este autor. Yo creo que Nesbø destaca por sí mismo, por sus libros y no necesita ningún tipo de comparativa además engañosa.

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  3. ¡Fantástica reseña, Paula!

    Soy fan de Nesbo pero después de leer tu comentario me dan ganas de volver a leer Petirrojo, una novela que se sale de los cánones de la negra nórdica y que como muy bien dices no es comparable a nada de lo que nos tratan de vender como negro nórdico.

    Me ha gustado mucho los aportes personales sobre el autor, es una forma genial de entender mejor la novela, su implicación personal hace que se lea con otra perspectiva y eso ayuda mucho.

    Gracias Paula, es un placer leer reseñas tan bien documentadas y que dan ganas de seguir leyendo la serie de Nesbo.

    ¡Un abrazo!

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  4. Excelente presentación del personaje de Harry Hole y de la serie de novelas, con un magnífico comentario de "Petirrojo".
    Enhorabuena, Paula, buen trabajo ;)

    Un beso,
    Eyre

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  5. Muchas gracias por los comentarios (¡¡y por el peloteo!!), me vais a sacar los colores.
    A todo el mundo no le puede gustar esta novela por más que digamos maravillas de ella, pero a mí con Harry (y también con Nesbo!) me pasa como a Nieves, es un familiar más (y muy querido).
    Un beso.
    Gracias!

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