Mervyn Peake: una búsqueda sin fin - KindOfMagic




La oscuridad cayó sobre el castillo, sobre el Bosque Retorcido y sobre la montaña de Gormenghast. Las largas mesas de los Moradores de Extramuros desaparecieron en el espesor de una noche sin estrellas. Los cactos y la avenida de acacias que Tata Ganga había recorrido, y la vetusta oxiacanta en el patio de los criados, se escondieron bajo el mismo sudario. Oscuridad en las cuatro alas de Gormenghast.




Mervyn Laurence Peake nació en China, en 1911, hijo de misioneros ingleses. Vive en Tietsin, al norte del país, hasta los once años. Para él, un niño que vivía entre los ingleses, que iba a un colegio inglés, China era un mundo extraño y lleno de contradicciones, que le impresionará profundamente y le servirá de inspiración para su obra, tanto pictórica como literaria, en muchas ocasiones.
A los diez años comienza a escribir su primera obra, un relato de gran ingenio para su edad: The White Chief of the Umzimbooboo Kaffirs, profundamente influenciada por las novelas de aventuras que leía, fundamentalmente La Isla del Tesoro.

Con doce años se trasladan a Inglaterra, estudia en el Eltham College, donde uno de sus profesores, Eric Drake, lo animará a desarrollar su faceta artística. Años después, cuando termina sus estudios en la Royal Academy School, lo invitará a formar parte de una colonia de artistas en la Isla de Sark, oferta que Peake acepta inmediatamente y donde pasará dos años. En esa época, ya había empezado a escribir poesía, muestra de ello es el poema narrativo A Touch o'the Ash, en Sark escribe Mr. Slaughterboard (que anticipa el tipo de fantasía que después encontraremos en Los libros de Titus, y no tiene nada que ver con uno de sus libros para niños: Captain Slaughterboard Drops Anchor), pero fundamentalmente se dedica a la pintura, que expondrá a su vuelta a Londres, consiguiendo rápidamente un notable prestigio para alguien de su edad.

A su regreso comenzará a dar clases en la Westminster School of Art, donde conocerá a la que será su esposa y musa: la también pintora Maeve Gilmore.
De esta época es el relato The House of Darkstones, donde encontramos por primera vez a Lord Groan, el Conde Sepulcravo de Los libros de Titus, y que Graham Greene consideraba un prólogo de Titus Groan.


A finales de 1939 es llamado a filas, y a pesar de que nunca salió de Inglaterra, a raíz de la disciplina militar, el miedo a los bombardeos y el hecho de que muchos de sus compañeros nunca regresaron de la batalla, sufrirá una crisis nerviosa y sería enviado a casa. Su mujer diría que su marido sobrevivió físicamente, pero no mentalmente.

Es en este momento, tras ser desmovilizado, cuando tenemos su período de mayor actividad: termina Titus Groan, que había comenzado a escribir en la base, y comienza Gormenghast. Ilustra La caza del Snark (Lewis Carroll), Rime of the Ancient Mariner (Coleridge), y, entre otros, los cuentos de los hermanos Grimm y Las Aventuras de Alicia en el País de las Maravillas y su continuación, de las que se ha dicho que son las mejores desde Tenniel.
Durante toda su vida seguirá ilustrando libros, como Casa desolada, de Dickens; El Dr. Jekyll y Mr. Hyde y La Isla del Tesoro, de Stevenson, o Droll Stories, de Balzac. Además, ilustrará todos sus libros, tanto las novelas como los poemas o los relatos cortos, pues la escritura y el dibujo iban siempre unidos para él, y la ilustración era un modo de visualizar a sus personajes, de darles una nueva dimensión.



En 1943, el Ministerio de Información le encarga diferentes trabajos, como los dibujos sobre los sopladores de vidrio, a los que también dedicó un libro de poemas (The Glassblowers), obteniendo críticas muy favorables, y varios premios.
Una vez terminada la guerra, se le encarga que, junto con el periodista Tom Pocock, vaya a Alemania, para que él dibujando y Tom relatando, expliquen el horror, la destrucción, que la guerra había causado, siendo unos de los primeros civiles que entraron en Belsen, el campo de concentración, visión que le marcaría profundamente. Fruto de esta experiencia, será una inquietante serie de pinturas y poemas: durante años había estado dibujando mundos extraños, ahora, tenía ante él un mundo mucho más monstruoso del que hubiera podido imaginar.

Tras esta experiencia, se irá a vivir de nuevo a la Isla de Sark, esta vez con su familia, donde termina Gormenghast, escribe poesía (The Rhyme of the Flying Bomb), historias cortas (entre las que destaca Boy in Darkness, que narra una extraña aventura de Titus Groan dentro de Gormenghast, publicada en el libro Sometime Never junto con historias de William Golding y John Windham) y pinta, años que todos recordarían como una de las épocas más felices de sus vidas, a pesar de que pronto tendrán que volver a Londres, en busca de ingresos fijos, donde vuelve a dar clases de dibujo y hace incursiones en el mundo teatral: diseña decorados, con notable éxito, y escribe una obra: The Witt to Woo, sin obtener el éxito que él deseaba y, agobiado por problemas económicos, tiene un ataque de nervios, tras el que le diagnostican de la enfermedad de Parkinson y demencia senil prematura en 1957, con sólo 46 años, con efectos devastadores, declinando rápidamente su salud. Consigue terminar Titus Solo, ilustrar algunos libros y escribir poemas de amor para Maeve y sus hijos.

Únicamente escribió cuatro novelas: My. Pye, injustamente olvidada, en la que, con fina ironía el propio Dios se burla de las pretensiones de la evangelización, y las conocidas como la Trilogía de Gormenghast, o como él los llamaba, Los libros de Titus: Titus Groan, Gormenghast y Titus Solo, es una trilogía accidental, ya que son parte de lo que iba a ser un ciclo más amplio, que contaría la vida de Titus Groan, Septuagésimo séptimo conde de Gormenghast, desde su nacimiento hasta el fin de sus días.
Estamos ante un tipo de fantasía diferente, en la que no encontramos ninguno de sus elementos clásicos, no hay seres fantásticos, magia, grandes batallas… es un mundo que roza el surrealismo, más influenciado por el gótico y los clásicos que por obras fantásticas. Ese mundo es Gormenghast.

Gormenghast, con esa palabra, nos trasladamos al Castillo. No hay una entrada, una puerta en el muro por la que vayamos entrando poco a poco, al abrir el libro, ya estamos allí, en la asombrosa creación de Peake. Así empieza: Gormenghast, es decir, la mole principal de la piedra originaria.
Pero, ¿qué es Gormenghast? Eso es algo difícil de explicar a quien no ha leído el libro: podríamos decir que es la galería de las Tallas Brillantes, la Torre de los Pedernales, sus tejados, las cocinas, sus sombras, el polvo y las ratas... un mundo que fascina, nos hace perdernos, nos descoloca y nos intoxica. Un lugar que ni sus mismos habitantes conocen del todo. Es quizás el protagonista principal de estos libros. Es una tierra limitada al Castillo, una ciudad en sí mismo, y sus extramuros, la tierra de los moradores (influencia de su infancia en China, de la ciudad amurallada y la pobreza de la gente que vivía fuera de ella, y también de la Isla de Sark, pues todo en Gormenghast da sensación de aislamiento, como si estuviésemos en una isla).
Aislado totalmente del exterior, no hay mención a la entrada de nada de fuera, aunque sí sabemos que existe un mundo más allá, como lo saben también sus habitantes.
Es un lugar antiguo, atemporal y decadente. Quizás, si queremos buscar un paralelismo con nuestro mundo, podríamos decir que es la Inglaterra del s. XIX: los caballos tiran de los carros, sus habitantes leen a la luz de las velas.

Gormenghast es también su ritual, su tradición, demencial y que debe cumplirse día a día, que nadie entiende pero que nadie discute, desde el color de que deben pintarse las paredes o el recorrido que debe seguirse para llegar a un lugar, hasta el festival de las tallas, que han realizado los moradores durante todo el año y en el que se escogen las tres mejores para exponerlas en la Galería de las Tallas Brillantes (lo que es también un recuerdo de China, de Taku Road, por la que pasaba todos los días para ir al colegio y que estaba llena de tallas de colores que los propios comerciantes realizaban).
Es también la tensión entre la tradición y el cambio, entre esas férreas leyes y tradiciones y la insurrección de Pirañavelo, que se niega a aceptar su destino de ser toda su vida un esclavo en las cocinas, con esto, amenaza el ritual, y todo lo que logra lo consigue gracias a lo que Gormenghast es: un lugar tan cuadriculado, tan fiel a su tradición, que los actos del rebelde escapan de su comprensión.

Junto con el Castillo, que es sin duda uno de los personajes principales, nos encontramos con sus habitantes, cuyos nombres, en el original, tienen claros ecos dickensianos: Rottcodd, Steerpike (Pirañavelo), Fuchsia, Prunescuallor, Flay (Excorio), Abiatha Swelter (Abiatha Vulturno), Lord Sepulchrave, Deadyawn (Bostezoyerto)… son sonoros, musicales, no están puestos al azar. Son personajes reales, de carne y hueso, aunque sean exagerados, excéntricos y en muchas ocasiones, grotescos.
A pesar de los personajes extraños, del Castillo, del ambiente casi onírico que se crea, los libros tratan temas universales: la búsqueda de la libertad, del amor, el ansia de poder, todo ello contado en muchas ocasiones de forma irónica, sarcástica, un modo quizás de burlarse de las debilidades humanas.

Poco se puede decir de su trama, como en un sueño, hay una especie de lógica interna en el mundo de Gormenghast, regido por unas leyes que no son las de la vigilia. Una concatenación de actos que llevan a los personajes a un destino inevitable.

A esta atmósfera contribuye sin duda el estilo de Peake, una prosa lírica y penetrante, hipnótica. Un lenguaje exuberante, barroco, rico y recargado, de otro tiempo. En consonancia con el escenario, con descripciones minuciosas hasta la locura, hace que nos introduzcamos en un mundo que nunca llegamos a conocer del todo.
Su escritura es inmensamente poderosa, inconfundible. Con una gran capacidad para crear estados de ánimo y atmósferas, sentimientos de asfixia, encierro, impotencia.
Podríamos decir que esto es lo que son los dos primeros libros, inseparables uno del otro. En el tercero, Titus Solo, conocemos el mundo más allá de Gormenghast, un mundo que en teoría debería ser más parecido al nuestro, y en cierto modo lo es, pero que se nos hace más extraño e incomprensible todavía. Este libro, publicado en 1959, anticiparía muchos de los elementos que años después se conocerían como Steampunk, y del que se considera su precursor.
Es quizás el más melancólico de los tres, donde está menos presente el humor que llenaba los anteriores, seguramente por el momento en el que lo escribió, tras su vuelta de Belsen, e incluso uno de los personajes parece sacado de allí: Black Rose (la Rosa Negra).
Del cuarto libro, Peake dejó un capítulo y una serie de notas inconexas. Su mujer, Maeve Gilmore, escribió Titus Awakes basándose en ellas, aunque más que una continuación, podemos considerarlo un homenaje a la obra de su marido, un experimento catártico, sin intención de publicarlo, fue encontrado a su muerte, en 1983, y publicado recientemente.

Estos libros son una obra de culto en Inglaterra, a pesar de que en el momento de su publicación fueron acogidos con entusiasmo por la crítica, y no tanto por el público en general. Sus más firmes defensores y entusiastas seguidores fueron sus compañeros, en ocasiones amigos de Peake: Dylan Thomas, Michael Moorcock, Anthony Burgess, Robertson Davies o Graham Greene.
De ellos se han hecho varias adaptaciones para la radio (por el propio autor), una serie de la BBC, y Peake realizó la adaptación para llevarla a la ópera, pero no consiguió que el proyecto viera la luz por falta de dinero, aunque finalmente se realizó en 1998.

Mervyn Peake falleció en 1968, tras doce años de lucha contra la enfermedad, dejando unos diez mil dibujos, 200 pinturas al óleo, novelas, poemas, relatos, cuentos infantiles, ilustraciones, obras de teatro, decorados… algunos de sus cuadros pueden verse en la National Portrait Gallery o en el Imperial War Museum, en Londres.

Bibliografía:
-A World Away. Maeve Gilmore. Introducción: Michael Moorcock.
-The illustrated Gormenghast Trilogy. Mervyn Peake. Introducción: China Miéville.
-Child of Bliss. Growing up with Mervyn Peake. Sebastian Peake.
-Peake's Progress. Mervyn Peake. Edited by Maeve Gilmore.

6 comentarios:

  1. Un artículo magnífico, Kind, me ha encantado :-D

    No conocía la vida de Mervyn y me ha impactado por todo lo que pasó y como le afectó a la hora de escribir sus libros.

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  2. ¡Muchísimas gracias Sinkim!
    El pobre tuvo mala suerte en muchas cosas :(
    Soy Kind, claro, que no sé cómo se pone el nombre ;) ¡Un abrazo!

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  3. Kind, es muy fácil, debajo del recuadro donde hay que poner la palabra de identificación, donde viene lo de "Elegir una identidad", marcas "Nombre/URL" y en Nombre escribes Kind :D

    ¡Un abrazo! :)

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  4. Kind, que interesante lo has pintado. Leyendo las sinopsis da otra impresión, no hacía que me atrajera.

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  5. Vaya, no habia visto el articulo, muy bueno Kind. La vida de Peake no tuvo desperdicio y eso se nota en sus obras. Hace unos dias estuve en Londres, de haber sabido que tenia pinturas en exposicion, seguro que habria ido a verlas...eso me pasa por no haber visto tu maravilloso articulo antes....enhorabuena Kind y gracias por tu entusiasmo!!

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  6. Fantastico artículo, enhorabuena. Los libros de Titus (sobre todos los dos primeros) son mis libros favoritos con diferencia, me encantan, no me sobra nada, una maravilla poco reconocida en el mainstream. Me gustaría me recomendaras otras lecturas de ese nivel (como info, he leído y me han encantado Susanna Clarke, Lanark, La hija del rey del pais de los elfos, Posesión ....) Gracias!!

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